A todos nos llega, tarde o temprano, ese trágico momento en el cual dejamos de ser niños. A todos. Sin excepción. Rasquen esta cerilla de hoy, que participó sin éxito en el VII Certamen de Literatura Hiperbreve Pompas de Papel, y cuidado no vayan a quemarse.
Cuando se hizo mayor, Santa Claus dejó de creer en los Reyes Magos.
13 comentarios:
Es verdad, el día que descubrí dónde guardaban los juguetes mis padres, dejé de ser un poco niño.
Un saludo indio
¿Cómo se sentirá un mito cuando se le cae un mito? ¿Dejaría de creer incluso en sí mismo al crecer? A muchos adultos les pasa. Buen reflejo de la pérdida de la inocencia. Abrazos, Víctor.
Reyes Magos y príncesas a la espera de su príncipe. Jaaaaaa.
Un abrazo, Victor
Buena cerilla Víctor. Nuestras inventivas también creen, claro que sí, al fin y al cabo existen, ¿no?.
Abrazos.
Para mi gusto, la mejor de todas las cerillas: ternura y un cuchillo afilado.
Hiciste muy bien en recomendarnos que nos cuidáramos del fuego.
Cuando pasan ese tipo de cosas te das cuenta de que el mundo no tiene salvación.
Pobre Santa.
Saludos, Víctor.
Y se hizo autónomo...
Un abrazo
Me imagino a que los Reyes Magos les pasaría lo mismo con Santa Claus cuando se hicieron mayores. Los unos dejaron de creer en los otros.
Mínimo y excelente.
¿Y quién le traía los juguetes a Santa entonces? Tu cerilla me parece una muestra excelente de ingenio creativo. Enhorabuena. Un abrazo.
A mí lo que de verdad me preocupa, dime egoísta si quieres, es que cuando crezca deje de creer en sí mismo y no me traiga regalos.
Santa pierde su inocencia y yo casi me pierdo tu cerilla.
Abrazos, Víctor.
Sin éxito? Pues me parece genial el micro.
Eso te pasa por buscar, David. Un abrazo.
Gracias, Maite. Debió de ser duro para Santa... Un abrazo.
Pues que esperen, Torcuato, que esperen. Un saludo.
Me recordó un poco a tu pulga sobre el dios que no te cree. "Nuestras inventivas también creen"... me gusta cómo suena, Agus. Un abrazo.
Anónimo vocacional: uno cuela; dos lo borro. Un abrazo spamero.
Pues Patricia, ni a mí ni al jurado nos acababan de convencer, esta cerilla. Me alegra que te gustara. Un abrazo.
Bueno, MAK, los reyes no existen, pero Santa todavía sí, ¿no? Un abrazo.
Y se quedó sin competencia... Otro para ti, Bicefalepena.
¿Pero los Reyes no son ya mayores, Manu? ¿No me digas que esas barbas son postizos? Un abrazo.
Como tu comentario, Esteban. Abrazos internacionales. Y que no decaiga.
Santo ya no quiere juguetes, Pedro. Juega durante todo el año con los nuestros, luego los envuelve y nos los regala. Gracias por tu comentario. Un abrazo.
Egoista, Jesus. Mientras Santa no deje de creer en ti, no hay problema. Un abrazo.
Pues sí, Pablo, sin éxito. Si es que el éxito se mide en el podio... De todos modos, un abrazo.
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